Pericoronaritis, Un Malestar Bucal que No Puedes Ignorar

La pericoronaritis es una afección común pero poco conocida que afecta principalmente a los adolescentes y jóvenes adultos.

Aunque su nombre puede sonar complicado, es un problema dental que, si no se trata adecuadamente, puede causar mucho dolor e incomodidad.

En este artículo, vamos a desglosar todo lo que necesitas saber sobre la pericoronaritis: desde qué es, por qué ocurre, cómo se diagnostica, hasta cómo se trata, y algunos datos curiosos para que entiendas mejor este malestar bucal.

Pericoronaritis

Conociendo Qué es la Pericoronaritis

La pericoronaritis es una inflamación e infección de los tejidos alrededor de una muela que está parcialmente erupcionada, es decir, una muela del juicio que no ha salido completamente o que está parcialmente cubierta por encía.

Este tipo de afección se produce principalmente cuando la encía alrededor de la muela del juicio se irrita o se infecta debido a que los restos de comida o la placa bacteriana quedan atrapados en el espacio entre la muela y la encía.

A medida que las muelas del juicio intentan salir (generalmente entre los 17 y 25 años), pueden empujar contra las encías causando dolor, hinchazón e infección en el área circundante.

Si no se trata, la infección puede extenderse a otras partes de la boca y causar problemas mucho más graves.

Por ello es necesario que si conoces a alguien con estos síntomas, se atienda inmediatamente.

Por qué ocurre la Pericoronaritis

Existen varias razones por las que la pericoronaritis puede desarrollarse y para que quede mas claro, las clasificaremos:

    1. Muelas del juicio parcialmente erupcionadas: Este es el principal factor. Cuando las muelas del juicio no salen completamente, dejan un pequeño espacio entre la muela y la encía donde se acumulan restos de alimentos y bacterias, lo que favorece el desarrollo de una infección.

    2. Higiene bucal deficiente: Si no se cepillan bien los dientes y las muelas del juicio, es más probable que se acumulen restos de comida y placa bacteriana alrededor de la zona afectada. Esto contribuye a la inflamación y a la infección.

    3. Dificultad de acceso: La ubicación de las muelas del juicio en la parte posterior de la boca dificulta su limpieza adecuada. Incluso con un buen cuidado dental, es común que los restos de alimentos se queden atrapados en esa área.

    4. Mala alineación de las muelas: Si las muelas del juicio están mal alineadas, pueden causar presión sobre los dientes cercanos o las encías, lo que aumenta el riesgo de pericoronaritis.

Conoce los Síntomas de la Pericoronaritis

Los síntomas de la pericoronaritis pueden variar de leves a graves y, en algunos casos, pueden ser tan intensos que afecten el bienestar general de la persona. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

    1. Dolor e inflamación en la parte posterior de la boca: El área alrededor de la muela del juicio se inflama y puede ser muy dolorosa al tocarla o al masticar.

    2. Enrojecimiento y sangrado de las encías: La encía alrededor de la muela erupcionada puede volverse roja, hinchada y sangrar, especialmente al cepillarse los dientes.

    3. Mal aliento (halitosis): La acumulación de bacterias en la zona afectada puede causar mal aliento.

    4. Dificultad para abrir la boca: La inflamación y el dolor pueden hacer que sea difícil abrir la boca completamente, lo que puede afectar las actividades cotidianas, como comer o hablar.

    5. Fiebre: Si la infección se propaga, la persona afectada puede experimentar fiebre, lo que indica que la infección es más grave.

    6. Dolor en la mandíbula o el oído: El dolor a veces puede irradiar hacia otras áreas cercanas, como la mandíbula o el oído.

Diagnóstico de la Pericoronaritis

El diagnóstico de la pericoronaritis es relativamente sencillo.

Por lo general, un dentista puede hacer un diagnóstico basado en 3 puntos importantes:

Historia clínica:

El dentista preguntará acerca de los síntomas, la duración del dolor y si la persona ha notado algún cambio en su boca, como enrojecimiento o hinchazón.

Examen físico:

Durante la consulta, el dentista examinará la zona afectada, buscando signos de inflamación, enrojecimiento, y verificando si hay acumulación de comida o bacterias en el espacio entre la muela y la encía.

Radiografías dentales:

En algunos casos, el dentista puede recomendar una radiografía para examinar el crecimiento de la muela del juicio y verificar si hay infecciones en los huesos circundantes.

El Tratamiento de la Pericoronaritis

El tratamiento de la pericoronaritis depende de la gravedad de la afección. En muchos casos, puede tratarse con medidas conservadoras, pero en situaciones más graves puede ser necesario un tratamiento quirúrgico. Los tratamientos más comunes incluyen:

    1. Limpieza profesional: El dentista puede realizar una limpieza profunda en la zona afectada para eliminar los restos de alimentos y placa bacteriana, lo que puede ayudar a reducir la inflamación y prevenir la infección.

    2. Antibióticos: Si la infección es severa o hay signos de que la bacteria se ha diseminado, se pueden recetar antibióticos para combatir la infección.

    3. Enjuagues bucales con antisépticos: El uso de enjuagues bucales con propiedades antimicrobianas puede ayudar a reducir la cantidad de bacterias en la boca y aliviar la inflamación.

    4. Analgésicos: Para controlar el dolor, se pueden recomendar analgésicos de venta libre como el paracetamol o el ibuprofeno.

    5. Extracción de la muela del juicio: Si los problemas persisten o si la muela del juicio está gravemente infectada o mal alineada, el dentista puede recomendar la extracción de la muela afectada.

¿Cuándo es Necesaria una Extracción?

La extracción de la muela del juicio no siempre es necesaria.

Sin embargo, si las muelas del juicio siguen causando infecciones recurrentes, dolor severo o problemas en los dientes cercanos, es posible que el dentista recomiende una extracción para evitar futuras complicaciones.

4 Datos Curiosos sobre la Pericoronaritis y las Muelas del Juicio

Para finalizar y hacer esto divertido, te queremos compartir estos 4 datos curiosos sobre esta enfermedad y las muelas el juicio.

    1. El nombre «muelas del juicio» proviene del hecho de que suelen salir cuando las personas están en una etapa de madurez, alrededor de los 17 a 25 años, lo que corresponde a la edad en la que se desarrolla el juicio o la madurez.

    2.  No todas las personas tienen muelas del juicio. De hecho, algunas personas pueden no desarrollar ninguna o solo tener una o dos. En algunas culturas, la extracción de las muelas del juicio se realiza de forma rutinaria para prevenir problemas futuros.

    3.  Aunque muchas personas asocian el dolor de las muelas del juicio con infecciones, a veces la causa del dolor puede ser la presión que la muela ejerce sobre los dientes cercanos.

    4. En tiempos antiguos, las muelas del juicio eran más necesarias para triturar alimentos duros y crudos, pero hoy en día, con una dieta más blanda, la necesidad de estas muelas es menor, lo que hace que sean más propensas a problemas como la pericoronaritis.

Conclusión

La pericoronaritis es una afección común que puede causar molestias significativas si no se trata adecuadamente.

Si experimentas dolor o hinchazón en la parte posterior de la boca, es importante consultar a un dentista para obtener un diagnóstico adecuado y evitar complicaciones.

Con un tratamiento adecuado, la pericoronaritis puede ser controlada, y si las muelas del juicio no son necesarias, la extracción puede ser una solución efectiva para evitar futuros problemas.

¡No ignores los signos de malestar en tu boca y mantén una buena higiene dental para mantener tu sonrisa saludable!

START TYPING AND PRESS ENTER TO SEARCH