Los retenedores en ortodoncia son la parte culminante de tu tratamiento de ortodoncia. Los retenedores son posicionadores que mantienen tus dientes en el lugar y posición ideales, una vez que te han retirado los brackets.
Cuando el ortodoncista retira los brackets, los dientes están ligeramente móviles, debido a que el hueso que existe alrededor de ellos, no se ha consolidado del todo.
Un retenedor, funciona como férula de los dientes, manteniéndolos en la posición ideal, donde los brackets te los han dejado.
Funcionan más o menos como un yeso.
Cuando alguien se fractura una mano o un pie, el yeso permite que la osificación de tus huesos fracturados se haga de la forma correcta, y los mantiene inmóviles hasta que el hueso se ha consolidado por completo, o está cerca de hacerlo.
Los retenedores cumplen una función vital para tu tratamiento de ortodoncia. El hecho de no utilizarlos, condena al paciente a que sus dientes vuelvan a moverse o desalinearse.
Particularmente en OrtoDental, recomendamos a nuestros pacientes utilizarlos durante 6 meses durante el día y la noche después de finalizado el tratamiento, lo que asegurará que sus dientes permanezcan derechos el resto de su vida. Posteriormente, se indica utilizarlos sólo por las noches.
Tipos de retenedores de ortodoncia
Existen distintos tipos de retenedores, que pueden clasificarse según el problema de cada paciente, o bien por las exigencias de los mismos. A continuación te mencionamos un poco de cada uno de ellos:
Retenedor Hawley:
Es una placa de acrílico con soportes metálicos. Es un retenedor removible, que es cómodo de utilizar, aunque al principio dificulta un poco el habla.
Sin embargo, al paso de 2 o 3 días, el paciente habla perfectamente con él, y pareciera que no lo trae en boca. Para su mantenimiento, basta cepillarlo con jabón neutro, o bien colocarlo con desinfectante durante 20 minutos.
Ventajas: Removible, fácil higiene.
Desventajas: Es visible, no sirve para casos donde los dientes estaban muy desalineados.
Retenedor Circunferencial:
Muy similar al Hawley, sólo que los componentes metálicos rodean a los dientes, permitiendo un mejor mantenimiento de los dientes en su posición ideal.
Se indica para casos complejos, por lo que es nuestra elección para la retención superior, a menos que el paciente pida algo más estético.
Ventajas: Removible, fácil higiene, permite cerrar espacios.
Desventajas: Es visible.
Retenedor Essix o Acetato:
Estos retenedores son muy estéticos. Están hechos con un material plástico especial, resistente que permite mantener los dientes en su posición.
Son bastante estéticos, pero tienen que cambiarse periódicamente, ya que duran de 6 meses a 1 año.
Ventajas: Estéticos
Desventajas: Pueden romperse, hay que cambiarlos cada 6 meses a un año.
Retendor Fijo:
Son retenedores que no requieren cooperación del paciente, puesto que van cementados a los dientes por la parte de atrás. Sin embargo, estos retenedores requieren especial cuidado, sobre todo con la higiene.
Si no se limpian, o si se despegan, pueden traer consecuencias como acúmulo de placa, o bien el desalineamiento de los dientes. Este tipo de retenedores son ideales para los pacientes más exigentes, ya que son practicamente invisibles e indetecbales, y mantienen todo en su lugar.
Ventajas: No se ven, no requieren cooperación del paciente.
Desventajas: Pueden acumular placa, o romperse si no se cuidan mordiendo alimentos rígidos.
Existen otros tipos de retenedores en ortodoncia, pero básicamente estos tipos son los más utilizados. En OrtoDental hacemos una especial selección para cada paciente, asegurándonos que sus dientes estarán derechos toda la vida.
A continuación les dejamos un video con los tipos de retenedores existentes:
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